Alegando una disminución considerable en sus ingresos a consecuencia de la operación de las plataformas digitales Uber y Diddy, taxistas de la ciudad de Toluca han iniciado una campaña para presionar al gobierno y puedan regular la operación de estas unidades de alquiler.
Y es que alegan que es una competencia desleal pues estas empresas trasnacionales, no pagan impuestos ni cumplen con la normatividad a la que ellos si están sujetos.
Aseveraron que desde la entrada en operación de estas plataformas, sus ingresos han caído drásticamente pues incluso llegan a esperar hasta dos horas para poder prestar el servicio a los ciudadanos pues la demanda ha disminuido.