Carlos Moreno Carreto
Toluca, Méx.- Mientras que el gobernador Alfredo del Mazo Maza y el presidente del Partido Revolucionario Institucional en la entidad, Ernesto Nemer Álvarez, inevitablemente en sus discursos externan el combate a la corrupción. En la práctica y en el día a día algunos servidores públicos de alto nivel se encargan de demostrar con hechos lo contrario.
Pues resulta que el secretario de Desarrollo Agropecuario (SEDAGRO) Darío Zacarías Capuchino, para cubrir su inseguridad para desempeñar el cargo y llenar su ego, se ha rodeado de un sequito sin experiencia que cobran en la nómina de dicha secretaría.
Por lo que hay que dejar en claro la indignante conducta de algunos servidores públicos frente a los graves rezagos ancestrales que se viven en el campo mexiquense, además de ser el sector más noble y desprotegido, así como con las mayores necesidades.
Pero lo que es inadmisibles que al titular de SEDAGRO se le haya ocurrido contratar un Chef para su servicio personal, de nombre Rafael Angeven de la Rosa, quién cuenta con un contrato laboral en la dependencia.
De la misma forma, Zacarías Capuchino contrato a una mujer de nombre Alejandra Magaña Montoya a quien le dio el nombramiento de Jefa de la Unidad de Información, Planeación, Programación y Evaluación con un salario de 60 mil pesos mensuales a pesar de que los temas del campo no los maneja.
Aunado a los anterior el ahora secretario se dio el lujo de contratar como coordinador de Finanzas de dicha dependencia a Isaac Mendoza Buenful, quien fungió como Tesorero en la administración municipal de Darío Zacarías Capuchino en Acolman
Además contrato a Jorge Alberto Reyes Olivares como contralor de SEDAGRO.
Así pues poco a poco van saliendo los trapitos al sol de los secretarios nombrados por el Ejecutivo estatal, conscientes de que serán de transición no quieren privarse de lujos que ni Dios quiera que tengan que pagar de su pecunio.
