Una casa abandonada fue el inmueble que un grupo de ladrones utilizó para poder ingresar por medio de boquetes a tres locales comerciales en pleno centro de la cabecera municipal de Lerma y a solo unos 40 metros de la oficina del alcalde.
En el transcurso de la noche, los delincuentes pudieran horadar los boquetes que les permitió el desvalijar los locales comerciales siendo los afectados una estética, un establecimiento de telefonía celular y un despacho jurídico.