Por: Nicolás Gochy
Poco más de dos mil personas participaron este día en la XII Marcha del Orgullo gay que se celebró en la ciudad de Toluca llenando de colores esta capital.
Ataviados con disfraces de todos tipos, orgullosos de su identidad, acompañados de sus familias y amigos que los apoyan, miles de participantes se congregaron en la que ha sido la marcha más números y mejor organizada de la que se tiene memoria en la capital mexiquense sin que se registraran problemas mayores a pesar del discurso de odio que intento sembrar la iglesia católica y organizaciones de derecha.
Durante varias horas, cientos de personas pasaban por los diferentes puntos que abarco la marcha y que se llevó a cabo en total tranquilidad.
De acuerdo a Israfil Filos Real, están marcha representa la lucha de generaciones por la igualdad, la libertad y la humanidad.
“Hoy marchamos en demanda a los derechos que nuestra dignidad merece, ha sido un anhelo de todas y de todos. A pesar de que el tema del respeto a las diversas formas de sexualidad humana ha ido emancipándose de la teología, la medicina, y finalmente de la psiquiatría, no podemos afirmar que hemos llegado a puerto en todas las esferas de la convivencia humana”.
Y es que dice la asociación a través de un posicionamiento que hicieron público, dentro de la población LGBTTTI existen abogados, mecánicos, maestros, médicos, amas de casa, contadores, secretarias, policías, comunicadores, padres de familia, albañiles, psicólogos, administradores, cocineras, afanadores, choferes, taxistas, investigadores, senadores, militares, peluqueros, diputados, cerrajeros, ministros de cultos, estudiantes, indígenas, artesanos, artistas, escritores, actores, vendedoras, comerciantes, porteras, pintores, deportistas, programadores, diseñadores, indigentes, mercadólogos, carpinteros, desempleados, herreros, obreros, directores, y todas las gamas posibles de profesiones, oficios y situaciones vitales.
“Todas y todos somos iguales ante la Ley, por eso nuestro lema en esta marcha es“Todas las obligaciones, todos los derechos”. Cuando pagamos impuestos nadie rechaza la contribución por ser rosa, cuando pagamos un derecho, cuando pagamos una multa, cuando pagamos una licencia, cuando pagamos un permiso, cuando pagamos un servicio no nos preguntan nuestra orientación sexual o identidad de género, pero cuando se trata de derechos entonces sí se nos ponen obstáculos”
“No le tenemos miedo al debate, porque la razón nos asiste; no le tenemos miedo a la injuria, nos han despreciado tanto y durante tanto tiempo que ya no le tenemos miedo al miedo, no le tenemos miedo al discurso de odio y discriminación porque este acaba por denostar más a quien lo dice que a quien lo recibe. La verdad, dan más lástima que pena, pero no nos confundamos, el verdadero enemigo es la ignorancia, la Iglesia y sus cofradías son sólo un obstáculo”.
