Carlos Moreno Carreto
Toluca, Méx.- Los mexicanos ya están hartos de la barbarie y de un político mexiquense al que el país se le está yendo de las manos, afirmó Rafael Loret de Mola Vadillo, durante la presentación de su más reciente libro: El Alma También Enferma. México se acerca a una transición política caótica, producto de la peor descomposición social y política que se recuerde.
El escritor comentó que el país carece de control político debido a que tiene un presidente enfermo, «enfermo de poder y enfermo físicamente», ya que aseguró que Enrique Peña Nieto ha sido intervenido ya en dos ocasiones «debido al cáncer que padece».
Explicó que en su libro expone el proceso de degradación política que México enfrenta en la actualidad, donde ha quedado de manifiesto «la íntima relación entre lo peor de la delincuencia organizada con lo peor de los políticos mexicanos».
Loret de Mola Vadillo calificó como hechos atroces e incalificables lo ocurrido en Tlatlaya, Estado de México, e Iguala, Guerrero, ambos casos presuntamente relacionados con la operación de grupos delictivos vinculados al tráfico de drogas.
Señalo que el narcotráfico es un asunto que jamás se podrá erradicar en este país, pues existen estudios muy serios que indican que si eso ocurriera la economía de Estados Unidos de América sufriría una caída del 18 por ciento, mientras que en México se derrumbaría 60 por ciento en su producción económica.
«El narcotráfico está profundamente involucrado y arraigado en todas las actividades políticas y económicas del país», dijo, Loret de Mola, y aseguró que el yerno del ex presidente Luis Echeverría Álvarez murió en una cárcel de Texas, acusado de narcotráfico, lo mismo que parientes de José López Portillo, Miguel de la Madrid y otros altos funcionarios públicos.
Finalmente dijo que no es posible de que en el Estado de México «se edifican monumentos en honor de los grandes capos», como calificó al ex gobernador Carlos Hank González, precisando que no es posible que la sociedad sea capaz de generar una conciencia que permita sanar el alma del país.
