En un acto de fe y devoción que ha trascendido de generación en generación, la peregrinación diocesana anual con destino a la Basílica de Guadalupe inició hoy, marcando el comienzo de un viaje espiritual para más de 45 mil fieles católicos provenientes de más de 26 diócesis del Estado de México.
Desde la ciudad de Toluca, el corazón ferviente de la peregrinación, los creyentes se congregaron en la catedral para escuchar la misa, desafiando el frío de la madrugada para dar inicio a esta travesía de tres días hacia la Ciudad de México.
El fervor religioso se hizo palpable desde las primeras luces del día, cuando los peregrinos, hombres, mujeres y niños de todas las edades, se reunieron tras la llamada de la misa matutina, celebrada a las 6 de la mañana.
Entre cánticos y oraciones, la caravana de creyentes emprendió su camino, con la esperanza encendida en sus corazones y la fe como guía en este peregrinaje anual.
La travesía, que se extenderá a lo largo de tres días, simboliza un acto de profunda devoción hacia la Virgen de Guadalupe, patrona de México, y un momento de conexión espiritual para los fieles que recorren kilómetros de camino. A lo largo de la ruta, los peregrinos llegaron a Ocoyoacac, después al paraje de la Marquesa, posteriormente a Cuajimalpa y finalmente la Basílica de Guadalupe.