Por: Nicolás Gochy
A unas semanas de que el puente de Alfredo del Mazo y López Portillo sea abierto a la circulación con la inauguración presidencial, los ingenieros de la Secretaria de Comunicaciones y Transportes demostraron una vez más que su preparación profesional evidencia muchas carencias, y es que a los funcionario del gobierno federal se les olvidaron colocar rampas para las personas de sillas de ruedas o muletas y n pueden pasar de un lado a otro.
A pesar de ostentar el logo de mover a México, la realidad es que solo se busca movilizar a unos grupos pues el de las personas con capacidades diferentes no podrá usar el distribuidor vial pues les es imposible subir con sus sillas de ruedas y muy difícil el hacerlo con muletas.
Por ello, solicitaron que antes de entregarlo pudieran hacer las adecuaciones necesarias para que sus medios de movilidad sean aptos para esta nueva estructura urbana.