El Estado de México se caracteriza por su riqueza natural, histórica, cultural y arquitectónica, además de poseer pueblos y comunidades con un alto potencial turístico.
Para desarrollar esta actividad, elevar el nivel de bienestar de la población receptora y fomentar el empleo así como la inversión, la Secretaría de Turismo federal puso en marcha en 2001, el Programa Pueblos Mágicos, a través del cual se ha mejorado la imagen urbana de los 111 destinos del país que actualmente cuentan con esta denominación, ya sea mediante el rescate de áreas verdes, la introducción de cableado subterráneo, restauración de edificios históricos e instalación de señalética turística, entre otros.
Con el programa Pueblos Mágicos, se busca que, a corto y mediano plazo, las localidades que se benefician con recursos de éste, puedan fortalecer su infraestructura, la calidad de los servicios que brindan a los visitantes y diversificar sus productos turísticos.
Los nueve destinos mexiquenses que poseen el nombramiento de Pueblo Mágico son Tepotzotlán donde puede visitarse el Museo Nacional del Virreinato, los Arcos del Sitio y el Parque Ecológico Xochitla; Valle de Bravo que se reconoce por la Presa Miguel Alemán, la cascada Velo de Novia y la iglesia del Cristo Negro, así como Malinalco, donde se puede practicar el turismo de naturaleza y aventura, además del cultural y arqueológico, visitando el museo Luis Mario Schneider, el templo prehispánico de Cuauhtinchán y la Parroquia del Divino Salvador que data del siglo XVI.
El Oro es otro Pueblo Mágico del Estado de México que destaca por su palacio municipal de estilo francés construido a principios del siglo XX, el Teatro Juárez y la presa Brockman; Metepec que se conoce por su alfarería en barro, el ex convento de San Juan Bautista y su Festival Cultural Internacional Quimera.
Por su parte, Aculco ofrece a los visitantes atractivos turísticos como los Lavaderos Públicos del siglo XIX y la Cascada de la Concepción, además de los quesos y productos lácteos que ahí se producen; mientras que Ixtapan de la Sal se distingue por sus curativas aguas termales, SPAs y su Parque Acuático del mismo nombre, considerado uno de los más grandes de América Latina.
El Pueblo Mágico de Villa del Carbón se caracteriza por las piezas de piel que elaboran los peleteros como zapatos, botas, prendas de vestir, sillas de montar y otros aditamentos para la charrería. También ofrece variados atractivos a los visitantes como el Centro Vacacional Chinguirito y el Balneario Las Cascadas, así como la Parroquia de la Virgen de la Peña de Francia.
Teotihuacán y San Martín de las Pirámides merecen especial atención porque de manera conjunta obtuvieron el nombramiento de Pueblo Mágico en 2015, ambos se caracterizan por el turismo cultural y entre sus atractivos destacan la zona arqueológica de Teotihuacán y su espectáculo Experiencia Nocturna, volar en globo aerostático y conocer el Teatro Subterráneo Tonalkalco, así como el Museo de los Murales Teotihuacanos “Beatriz de la Fuente”.
Sin duda, el Estado de México posee una amplia gama de posibilidades para pasarla bien, tener experiencias únicas, ejercer todo tipo de turismo, cultivarse y sobre todo divertirse en compañía de tu familia o amigos.
La Secretaría de Turismo invita a disfrutar los atractivos que ofrece el territorio mexiquense. Para mayores informes comunicarse a los teléfonos 01-722-275-6880 y 81, o bien a través de las redes sociales Twitter @EdoMexTurismo y Facebook EdomexTurismo.