Campesinos de la zona norte del Estado de México solicitarán una reunión de trabajo con la gobernadora electa, Delfina Gómez Álvarez, y pueda intervenir a favor en el caso de la empresa de BIONATUR, pues tras más de 20 años de afectaciones al suelo y cuerpos de agua, hoy exigen el cierre total de esta empresa.
De acuerdo con los campesinos, la empresa tomatera perteneciente a grupo IUSA que opera en el municipio de Jocotitlan, ya evidenció el uso de técnicas antigranizo y la interrupción de ciclos de lluvia, lo que ha provocado una disminución de producción del campo en esta región de más de 60 por ciento por la falta de agua para el riego.
Bernardo Vázquez agricultor e integrante del movimiento «Frente por la Vida» reiteró que los Ejecutivos Federal y Estatal; asi como PROFEPA y SEMARNAT han sido omisos a los acuerdos firmados en la última reunión establecida en 2022.
Agregó que los bombardeos a las nubes con químicos para impedir el ciclo pluvial no han sesado por parte de Bionatur, pese a que esta se había comprometido a suspender los sobrevuelos con sus avionetas y los cañones.
Tras varias reuniones en los últimos días, estas personas confían en que la maestra Delfina Álvarez pueda atender las denuncias y poner “orden” en esta región de estado, donde los estadios y muestreos recabados apuntan afectaciones en cerca de 14 municipios y cerca de 20 mil campesinos.
«Hay que continuar para cumplir el objetivo y encontremos una solución con el gobierno entrante ,vamos a exigirle un cambio y hacemos el llamado a la maestra Delfína y que ponga atención a esta situación que es el agua; y la parte más importante de sobrevivencia del ser humano, no solo de nuestros cultivos.Como movimiento vamos a realizar un desplegado de nuestras peticiones y acordar fechas porque el planteamiento ya se le hizo y ya lo sabe, y vamos a hacerlo evidente para que vea nuestras necesidades «dijo.
